El presidente de la república, José Raúl Mulino, anunció durante su reciente conferencia la decisión de concesionar el Aeropuerto Internacional de Tocumen. Según Mulino, la terminal aérea enfrenta diversos problemas relacionados con la corrupción, desde el manejo de las planillas hasta la entrega de contratos en comercios. En sus palabras, “esta terminal aérea no está funcionando bien”.
Entre los proyectos más apremiantes se encuentra la construcción de una tercera pista y la habilitación de diez salidas que actualmente no están operativas. Mulino destacó que “cada salida cuesta una barbaridad de plata”, y si se lleva a cabo la tercera pista, podrían requerirse indemnizaciones a los vecinos. Asimismo, el mandatario mencionó a los problemas ambientales, dando énfasis a la reproducción de aves en los manglares cercanos, que representan un riesgo para la aviación.
La concesión del Aeropuerto Internacional de Tocumen se está considerando con seriedad, involucrando la participación de empresas reconocidas en la administración de aeropuertos. Mulino aseguró que ya hay interés por parte de algunas firmas para la gestión de no solo Tocumen, sino también de otros aeropuertos, como los de Río Hato y Colón. El objetivo es mejorar la eficiencia y asegurar la rentabilidad que el estado panameño necesita, ya que actualmente las aportaciones son mínimas.
En los próximos 60 a 90 días, el gobierno espera poder definir el camino a seguir. Mulino es optimista, afirmando que “un proceso de concesión será lo mejor para el aeropuerto internacional de Tocumen”.