El Dorado, Maiquetía, Tocumen. ¿Qué los convierte en un hub?

  • La aviación moderna depende de centros de conexión para ser más eficientes en sus operaciones. Comparamos tres aeropuertos ubicados en la misma región geográfica.
  • Un aeropuerto es relevante cuando su ubicación e infraestructura se combinan con incentivos para atraer aerolíneas, sumado a una relativa y necesaria estabilidad política y económica del país.
  • Los datos mostrados aquí corresponden a tiempos pre pandemia. La reactivación paulatina de la actividad aeronáutica dirá si el crecimiento e importancia se retoma en cada una de estas plazas aéreas, ahora sí, dependiendo de la recuperación económica en general, asociada al control y eventual superación de la emergencia sanitaria.

El término hub ha sido empleado, originalmente, en el mundo de la tecnología informática. Un hub, por definición, es un dispositivo que tiene la función de interconectar computadoras de una red local. La aviación lo tomó prestado y lo convirtió en una palabra de amplio uso, conforme las aerolíneas crecían y diversificaban rutas y estrategias comerciales. Básicamente, un hub es un centro de conexión – aeropuerto- que una aerolínea usa como punto de transferencia de pasajeros para cubrir variedad de destinos.

Pero, ¿puede cualquier aeropuerto ser un hub? Depende. Una cosa es cierta: un hub no se decreta, se construye. La política gubernamental tiene mucho que ver con el éxito o fracaso de un aeropuerto, porque son estructuras dependientes de presupuestos públicos en la mayoría de los casos, políticas impositivas, gerencia especializada y, voluntad para atraer negocios, léase aerolíneas. El contexto político-económico es decisivo.

La ubicación también es clave, pero no lo es todo. Tomemos como ejemplo tres aeropuertos muy cercanos, en la zona central del continente americano, alrededor del Caribe y norte de Suramérica. En la práctica, por sus ubicaciones geográficas, competirían directamente para distribuir tráfico aéreo de norte a sur, en el Caribe, y también hacia el continente europeo. Sin embargo, en la realidad latinoamericana, la historia puede variar.

 

Aeropuerto El Dorado, Bogotá, Colombia.

Un aeropuerto que ha estado en constante crecimiento, en paralelo con el aumento del turismo a Colombia, luego de años de excelentes campañas publicitarias y de marketing de la marca-país, al tiempo que la amenaza permanente de la guerrilla local disminuyó hasta llegar a una situación de relativa paz.  

En su afán de modernización, El Dorado ha mostrado nuevas áreas y servicios. El medio Global Travelers lo ha reconocido como “el mejor de Suramérica”. El Dorado ha reabierto a los vuelos comerciales desde el pasado mes de septiembre, cuando promedió 150 mil pasajeros movilizados; una décima parte en comparación con febrero 2020, cuando sus números llegaron a ser diez veces mayor.

Se espera que El Dorado retome su nivel normal de operaciones en los próximos años, en la medida que se supere la emergencia sanitaria, más personas manifiesten su disposición a viajar, y las aerolíneas que operan desde allí aumenten sus frecuencias.

Aeropuerto Internacional de Maiquetía, que sirve a la ciudad de Caracas, Venezuela.

Ubicado de manera inmejorable en el norte de Suramérica, de cara al mar Caribe. Maiquetía estuvo alguna vez en la preferencia de aerolíneas internacionales que volaban de Europa a Suramérica, desde la década de 1970, cuando el Concorde de Air France aterrizaba en vuelo regular. La última cifra disponible para el público data de 2014, e indica que el aeropuerto manejó 11,5 millones de pasajeros anuales, un promedio de 958.000 viajeros por mes. Hoy la historia es otra.

En Venezuela, la ausencia de una aerolínea local fuerte y de proyección internacional, el incumplimiento de parte de las autoridades financieras de los acuerdos en materia de repatriación de las ganancias de aerolíneas extranjeras, y la crisis política y económica que ha asolado al país suramericano durante la última década, pudieron más.

Como consecuencia directa, la mayoría de las aerolíneas internacionales abandonó el espacio o disminuyó drásticamente sus frecuencias y, para febrero de 2020, Maiquetía era un aeropuerto que ofrecía escasas opciones semanales.

Es muy probable que Tocumen y El Dorado deban parte de su crecimiento reciente a la caída en importancia de Maiquetía, cuyo tráfico aéreo internacional buscó alternativas cercanas más atractivas.

En época de pandemia, Maiquetía todavía se mantiene cerrado para vuelos regulares comerciales de pasajeros, y solo están autorizados eventuales vuelos denominados de interés humanitario, además de las operaciones de carga aérea.

Aeropuerto de Tocumen, Ciudad de Panamá, Panamá.

Este es un aeropuerto cuyo atractivo y crecimiento está asociado ineludiblemente a la operación de Copa Airlines, la aerolínea panameña que vio la ubicación geográfica como ventaja competitiva y resolvió impulsar el llamado Hub de Las Américas como eje central de su operación. Una suerte de simbiosis aeropuerto-aerolínea, de las mejores en el continente.

Al mismo tiempo, Tocumen construyó una infraestructura que facilita las conexiones, así como el desplazamiento eficiente de los pasajeros entre las distintas puertas de embarque. En la última década se ha expandido su área terminal y es una buena opción para compras entre conexiones, lo que lo hace particularmente atractivo para los pasajeros en tránsito que no pueden aprovechar los centros comerciales de la ciudad. Tocumen se reactivó oficialmente el 12 de octubre de 2020 y reportó 80 operaciones ese mismo día.

Lo imperativo

El fomento de la actividad aerocomercial para beneficio de la economía nacional es un imperativo, a medida que se supera la emergencia sanitaria. Además de la creación de empleos directos e indirectos, la aviación genera una imagen positiva que atrae más negocios a la región, en un ciclo que se renueva de forma constante.

Pero, hay algo más importante: estabilidad económica y política; a partir de aquí, todo lo demás se facilita para hacer del aeropuerto un imán para el desarrollo, un verdadero hub. Tocumen y El Dorado cumplen con los requisitos. Maiquetía mantiene todavía el potencial de retomar su lugar de importancia en la región; cuestión de tiempo, voluntad de las autoridades competentes y contexto político.

Luis Manuel Vargas M.
Comunicador Social. UCAB 92. CNP #7761
@aeroconexion
www.aeroconexion.wordpress.com

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