El Valle Sagrado de los Incas, a solo hora y media de Cusco, se revela como un destino inigualable donde la mística andina se fusiona con la aventura y la majestuosidad natural. Este enclave ofrece a sus visitantes una conexión profunda con la cultura inca a través de sitios arqueológicos y comunidades locales, así como experiencias cargadas de adrenalina para los amantes de la naturaleza.
Para aquellos que buscan explorar los impresionantes paisajes del Valle Sagrado, se destacan cuatro actividades que prometen experiencias inolvidables:
Ciclismo en Maras: Recorre los senderos de Maras en bicicleta, maravillándote con sus paisajes montañosos y cielos azules. Puedes elegir entre rutas de diferente dificultad, desde un corto trayecto hasta el pueblo de Maras para adaptarte a la altura, hasta recorridos más extensos que te llevarán a las asombrosas Salineras de Maras, un espectáculo de más de 3.000 pozos de sal, o a las enigmáticas terrazas circulares de Moray, un centro de experimentación agrícola inca. Se recomienda encarecidamente realizar esta aventura con una empresa de turismo autorizada para garantizar la seguridad y el disfrute.
Turista haciendo ciclismo por Urubamba
Kayak y Stand Up Paddle en Piuray: Conéctate con la naturaleza en las tranquilas aguas de la laguna de Piuray. Rodeada de montañas y poblados encantadores, esta actividad te permite admirar la belleza del entorno desde un kayak o tabla de paddle surf. La experiencia se puede complementar con clases de cocina o yoga a orillas de la laguna, profundizando la conexión con este entorno idílico.
Canopy en los Andes: Experimenta el Valle Sagrado desde una perspectiva única con el canopy o tirolesa. Deslízate a toda velocidad sobre cables que ofrecen vistas panorámicas de ríos y montañas, con dosis de pura adrenalina. Hay opciones que van desde un solo cable hasta circuitos de más de 2.000 metros de recorrido aéreo, permitiéndote sentirte como un cóndor sobrevolando el paisaje.
Vía Ferrata: Adrenalina al Máximo en Ollantaytambo: Para los más audaces, la vía ferrata de Ollantaytambo combina senderismo de montaña y escalada. Asciende por paredes rocosas equipadas con escalones y puentes colgantes, alcanzando hasta 300 metros de altura. La subida, que se realiza con arneses y cables fijos para mayor seguridad, suele culminar con un emocionante descenso en rápel de 100 metros y la recompensa de vistas inmejorables del valle desde miradores naturales.
Fácil Acceso desde Colombia
Perú es un destino fácilmente accesible, ideal para escapadas cortas o vacaciones más largas. Desde Bogotá, Medellín o Cartagena, se puede volar a Lima y luego tomar un vuelo a Cusco, o aprovechar los vuelos directos de Bogotá a Cusco, facilitando aún más la llegada a este mágico rincón de los Andes.
