El pasado viernes 9 de mayo, la Unión Europea (UE) inauguró la exposición ‘Panamá y Europa: Caminos que Unen’, en el palacio de gobierno de Ciudad de Panamá.
Esta exhibición tiene como objetivo rendir homenaje a la relevancia de las rutas coloniales, incluyendo los Caminos de Cruces y Real, que han marcado profundamente la historia del país centroamericano.
La embajadora de la UE en Panamá, Isabela Matusz, subrayó que esta exposición, no solo destaca nuestra historia común basada en estas rutas históricas, sino que también invita a reflexionar sobre su desarrollo.
Resalta el impacto de infraestructura crítica como el tren y la ampliación del Canal de Panamá, donde la unión europea ha tenido un papel significativo. Esta revelación es clave para entender cómo esos caminos han influido en la Panamá moderna.
‘Panamá y Europa: Caminos que Unen’ estará disponible desde el viernes 9 de mayo y se extenderá hasta el 18 de mayo. El público podrá acceder gratuitamente a una serie de textos y fotografías que documentan la historia de las rutas coloniales.
Las personas que visiten la exhibición también podrán aprender sobre patrimonio mundial de la región, como el castillo de San Lorenzo y el Fuerte de Portobelo. Además, se ofrecerán consejos para recorrer estos caminos históricos, destacando la flora y fauna únicas que encuentran en sus trayectos.
Historia de estos caminos: Desde el siglo XVI, Panamá ha sido un punto estratégico para el comercio entre España y sus territorios en América. En plena época colonial, los españoles levantaron dos rutas fundamentales para el transporte de mercancías: el Camino de Cruces y el Camino Real.
El Camino de Cruces unía la Ciudad de Panamá con San Lorenzo, atravesando la geografía panameña por tierra y por río. Mientras tanto, el Camino Real culminaba en Portobelo, otro puerto clave en el Caribe. Estas vías no solo sirvieron para transportar mercancías, sino que también fueron esenciales para la circulación de personas y el desarrollo de la economía colonial.
Su importancia se refleja en infraestructuras modernas como el ferrocarril interoceánico y el Canal de Panamá, que continúan facilitando el comercio internacional y consolidando la relevancia del país en la economía global.
Hoy, más de cinco siglos después de su construcción, el Camino de Cruces y el Camino Real han sido incorporados a la Ruta Colonial Transístmica, una iniciativa cultural que busca preservar y resaltar el legado histórico de estas vías.