La ciudad de Caracas fue a través de los años un codiciado destino turístico, su monumental geografía dominada por el majestuoso Ávila, su moderna arquitectura, una importante y variada gastronomía, vida nocturna, actividades culturales, y muchos otros recursos naturales y artificiales la convirtieron en una de las ciudades más visitada de Latinoamérica. Aunque la ciudad ya había comenzado a modernizarse durante el gobierno de Guzmán Blanco, presidente que buscó impregnarle un toque francés, no fue sino hasta los años cincuenta cuando arrancó la verdadera transformación urbana que cambió la visión nacional e internacional sobre esta; obras como la urbanización El Silencio, las Torres Simón Bolívar, la Avenida San Martín, la Ciudad Universitaria, el Hospital Universitario, el Paseo de los Ilustres, el Teleférico, el hotel Humboldt, el Helicoide, Parque Central, el Complejo Teresa Carreño, el Metro de Caracas, la Cota Mil y su empalme con la autopista del este, y diversos centros comerciales, colocaron a Caracas
entre las ciudades más modernas del continente.
En las décadas de los 40´s y 50´s Caracas tenía un importante número de clubes nocturnos, salas de baile y cabarets muy reputados por cierto, y muy bien descritos por el periodista Oscar Yánez (+) en su libro “Del Trocadero al Pasapoga”, los cuales competían con sus homólogos de La Habana, y entre sí, por atraer a los mejores artistas y orquestas de la época; luego en los años 60´s y 70´s Caracas destacó como centro de gastronomía internacional, y contó con un número récord de discotecas y centros nocturnos. En estas décadas se construyeron importantes hoteles como el Caracas Hilton, el Anauco Hilton, y la ampliación del hotel Tamanaco, y se iniciaron las construcciones de los hoteles Eurobuilding, Paseo Las Mercedes y Meliá Caracas.
Al Puerto de la Guaira llegaban numerosos barcos de crucero desde donde subían a Caracas muchos autobuses repletos de visitantes extranjeros quienes en promedio pasaban unas siete horas disfrutando la ciudad y sus atractivos turísticos, aprovechando para comprar prendas de oro, artesanías y souvenirs.
El Aeropuerto de Maiquetía era un importante centro de conexiones internacionales (HUB), al cual llegaban más de 25 líneas aéreas extranjeras y donde las empresas venezolanas tenían una importante actividad.
Venezolana Internacional de Aviación -VIASA- conectaba al menos a 30 ciudades extranjeras con Caracas, lo que permitía una excelente conectividad.
Caracas tiene todas las posibilidades de volver a ocupar su posición como destino internacional; ahora tiene muchos más hoteles, sigue teniendo excelentes restaurantes y recursos naturales y artificiales que visitar, pero hay que trabajar fuerte en el relanzamiento de la conectividad aérea, en ofrecer tarifas más competitivas, no es posible que sea más caro viajar a Venezuela desde ciudades en el continente americano, que hacerlo al resto del mundo. Debemos captar nuevamente buques de cruceros hacia el Puerto de La Guaira, recuperar obras icónicas como el Metro de Caracas, trabajar seriamente en los temas de continuidad y estabilidad de los servicios públicos, seguridad, limpieza, y mantenimiento de la vialidad.
Contamos con excelentes empresas venezolanas operadoras de turismo receptivo las cuales tienen la experiencia y los contactos internacionales para promover la llegada de nuevos visitantes, así, si le ponemos voluntad y dinero al proyecto, con una adecuada promoción, en pocos años Caracas volverá a ser una estrella del turismo Latinoamericano.
Willian J. Bracho
Abogado, Especialista en Dº de la Navegación
Maestría en Gerencia del Turismo Sostenible
wjbracho@yahoo.com