Al menos en los próximos cien años. Los astrónomos señalan que este asteroide, de unos 340 metros de largo, no representa un riesgo para el planeta.
Se habló de este asteroide como Dios del Caos, que llegaría en 2029. Más tarde se habló de 2036 como fecha del encuentro. Pero, a pesar de que este asteroide pasará muy cerca de nuestro planeta (a unos 30.000 km) en algún momento del futuro, y que forma parte de un grupo de 2.000 asteroides potencialmente peligrosos, la NASA señala que podemos estar tranquilos, al menos durante los próximos 100 años.
Después de su descubrimiento en 2004, el asteroide 99942 Apophis o Apofis (nombre griego del antiguo dios egipcio Apep, «el destructor”) había sido identificado como uno de los asteroides más peligrosos para la Tierra. Pero esa evaluación cambió a medida que los astrónomos lograron seguir con mayor precisión la órbita de este objeto.
Ahora, los resultados de una nueva campaña de observación por radar combinada con un análisis orbital preciso han ayudado a los científicos a concluir que no hay riesgo de que Apophis impacte nuestro planeta durante al menos un siglo.
Apophis, que se estima tiene unos 340 metros de ancho, rápidamente ganó notoriedad como un asteroide que podría representar una seria amenaza para la Tierra cuando los astrónomos predijeron que se acercaría incómodamente en 2029. Gracias a observaciones adicionales del objeto cercano a la Tierra ( NEO), posteriormente se descartó el riesgo de un impacto en esta fecha, al igual que el riesgo potencial de impacto que plantearía otro acercamiento cercano en 2036. Sin embargo, hasta este mes aún quedaba una pequeña posibilidad de impacto en 2068.
Cuando Apophis sobrevoló la Tierra alrededor del 5 de marzo, los astrónomos aprovecharon la oportunidad para utilizar observaciones de radar para refinar la estimación de su órbita alrededor del Sol con extrema precisión, lo que les permitió descartar con confianza cualquier riesgo de impacto en 2068 y mucho después.
«Un impacto en 2068 ya no es una posibilidad, y nuestros cálculos no muestran ningún riesgo de impacto durante al menos los próximos 100 años – afirma Davide Farnocchia del Centro de Estudios de Objetos Cercanos a la Tierra (CNEOS) de la NASA -. Con el apoyo de observaciones ópticas recientes y observaciones de radar adicionales, la incertidumbre en la órbita de Apophis se ha reducido de cientos de kilómetros a solo un puñado de kilómetros cuando se proyecta para 2029. Este conocimiento enormemente mejorado de su posición en 2029 proporciona más certeza de su moción futura, por lo que ahora podemos eliminar a Apophis de la lista de riesgos”.
Esta lista es la tabla de riesgo de impacto de Sentry, del CNEOS, y señala los asteroides cuyas órbitas los llevan tan cerca de la Tierra que no se puede descartar un impacto. Esta tabla ya no incluye a Apophis. Para llegar a esta conclusión, los astrónomos recurrieron a la antena de radio de 70 metros en el Complejo de Comunicaciones del Espacio Profundo Goldstone, lo que les permitió rastrear con precisión el movimiento de Apophis.
“Aunque Apophis se acercó recientemente a la Tierra, todavía estaba a casi 17 millones de kilómetros de distancia. Aun así, pudimos adquirir información increíblemente precisa sobre su distancia con una exactitud de unos 150 metros – afirma Marina Brozovic, científica del Jet Propulsion Laboratory -. Esta campaña no sólo nos ayudó a descartar cualquier riesgo de impacto, sino que nos preparó para una maravillosa oportunidad científica».
Aunque las imágenes de radar de Apophis parecen pixeladas, las imágenes tienen una resolución de 38,75 metros por píxel, “lo cual es una resolución notable, considerando que el asteroide estaba a 17 millones de kilómetros de distancia, o aproximadamente 44 veces la distancia Tierra-Luna – añade Brozovic -. Si tuviéramos unos binoculares tan potentes como este radar, podríamos sentarnos en Los Ángeles y leer el menú de una cena en un restaurante de Nueva York».
El 13 de abril de 2029, el asteroide Apophis pasará a menos de 32.000 de la superficie de nuestro planeta, más cerca que la distancia de los satélites geosincrónicos. Durante esa aproximación cercana, Apophis será visible para los observadores terrestres en el hemisferio oriental sin la ayuda de un telescopio o binoculares. También es una oportunidad sin precedentes para que los astrónomos obtengan una vista de cerca de una reliquia del sistema solar que ahora es solo una curiosidad científica y no un peligro inmediato para nuestro planeta. En esta web de la NASA puedes verlo en directo… por si no te lo crees.